Día tras día, las industrias generan más y más desechos al planeta, suficientes para llenar más de 800.000 piscinas olímpicas. La contaminación y el cambio climático son problemas reales que nos afectan a todos, independientemente de la nacionalidad, sexo o raza. Por lo tanto, existe una necesidad urgente de encontrar formas de producir productos basados en la sostenibilidad y en prácticas amigables con el medio ambiente.
Encuentra respuestas y entiende sobre esta creciente tendencia en la industria del chocolate:
El consumidor de hoy es cada vez más consciente de la importancia de hacer un uso razonable de los recursos naturales y del impacto que tienen sus decisiones de compra. Eso ha llevado a las empresas a acomodar sus prácticas a nivel productivo. Hoy en día, reciclar ya no es suficiente. Las industrias están llamadas a adoptar métodos innovadores en sus procesos llevando la reutilización de los residuos un paso más allá; a través de un concepto conocido como Upcycling.
Upcycling o supra-reciclaje significa utilizar desechos o residuos para producir nuevos materiales o productos de mayor valor ecológico con un factor determinante: la imaginación. De ahí que el upcycling sea una gran alternativa para frenar las consecuencias del consumo masivo. Una herramienta creativa para reinventar productos con lo que ya existe, fomentando la economía circular , y aprovechando los recursos que ya tenemos a la mano.
La sostenibilidad es uno de los pilares de nuestra cultura corporativa. Estamos comprometidos con el cambio climático, la prevención de la contaminación y buscamos ser una empresa neutra en carbono para 2030. Por tanto, encontramos en el upcycling del cacao un enfoque innovador para reducir el impacto ambiental de nuestro negocio y transformar positivamente la cadena de valor.
Hoy en día, empresas de todos los tamaños están actuando para reducir el desperdicio de alimentos mediante el upcycling. Luker Chocolate está en la vanguardia acerca de aquellos cambios que afectan nuestra industria, por lo que estamos trabajando en el desarrollo de nuevos productos a partir de la reutilización de los residuos de cacao.
De hecho, en la producción del chocolate solo se utiliza el 18,3% del fruto del cacao, lo que significa que el 81,7% del fruto está siendo subutilizado, perdiendo importantes oportunidades para innovar en la creación de nuevos productos a base de cacao.
“Nuestra industria enfrenta un gran desafío con este escenario. Usando nuestra metodología innovadora y en alianza con el equipo de Investigación, estamos trabajando en nuevas alternativas para utilizar los residuos de cacao. Para que esto sea posible, nos inspiramos en tecnologías de diversas industrias para diseñar nuestros procesos y nos apoyamos en aliados que tienen experiencia y conocimiento en diferentes categorías de productos que estamos comenzando a explorar”, dice María Paula Rodríguez, Senior Business Innovation Manager en Luker Chocolate.
Por otro lado, aparte del problema del desperdicio de alimentos, hay otro aspecto fundamental a mencionar: los ingresos de los agricultores. En la producción tradicional de chocolate, los cacaocultores suelen recibir ingresos solo por la cosecha de los granos o semillas, pero ahora “el upcycling nos permite innovar en la fabricación de nuevos productos a partir de residuos de cacao, brindando ingresos adicionales a los pequeños productores y generando nuevos empleos en la industria”, dice Rodríguez.
Todos conocemos el chocolate, pero pocos saben que el chocolate sabroso y cremoso está hecho de la semilla de una fruta: el cacao. Pero hay mucho más que simplemente sus semillas. Esta fruta que crece en zonas tropicales cerca de la línea del ecuador, consta de cáscara, una pulpa de fruta blanca y dulce, jugo y semillas. No obstante, la pulpa y el jugo suelen desecharse durante el proceso de elaboración del chocolate.
¡Y aquí es donde el upcycling aparece como una solución inteligente! Nuestro equipo ha desarrollado nuevos métodos y ha encontrado formas creativas de utilizar todos los componentes de la fruta reutilizando la pulpa y el jugo del cacao, abriendo nuevas posibilidades en la producción de alimentos y bebidas y de gastronomía en general. De acuerdo con la Upcycled Food Association, el upcycling del cacao reduciría la misma cantidad de CO2 que plantar 3.500 millones de árboles al año.
Además, el fruto del cacao tiene muchas propiedades nutricionales y funcionales que pueden ser aprovechadas en diferentes industrias, no solo la alimenticia. “En nuestra empresa venimos trabajando en una planta piloto de alta tecnología para encontrar nuevas aplicaciones al cacao, y así ampliar nuestro portafolio a nuevas categorías como productos de belleza y cuidado personal, biomateriales y energía”, dice la experta.
Por lo tanto, vemos en el upcycling de los desechos de alimentos una oportunidad importante para educar a los consumidores y la industria sobre el impacto positivo del consumo responsable en el medio ambiente.
¿Es una moda pasajera? Realmente no. Este fenómeno es todo un movimiento creciente arraigado en soluciones basadas en productos de consumo, lo que lo convierte en una solución atractiva al problema del desperdicio de alimentos en el mundo.
De hecho, esta práctica contribuye a uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por la ONU para 2030: reducir el desperdicio de alimentos. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), más del 30% de todos los alimentos producidos a nivel mundial se pierden o se desperdician, y eso es un gran problema para la sociedad y el planeta.
En lugar de desechar partes esenciales de verduras y frutas, el upcycling transforma y convierte estos sobrantes en alimentos nutritivos y de calidad. Por ejemplo, los desechos de alimentos se pueden usar para fabricar productos como suplementos dietéticos, productos cosméticos, bebidas, refrigerios e incluso alimentos para nuestras mascotas.
El Upcycling no solo ayuda al medio ambiente, sino que también genera ingresos económicos. Al reutilizar materiales que otros pueden no encontrar deseables, las compañías pueden hacer grandes ahorros en la compra de suministros. De igual manera, esta práctica podría ayudar a crear nuevos empleos en la industria alimenticia en los próximos años.
Un estudio reciente realizado por Future Market Insights, una firma de consultoría de investigación de mercados encontró que el tamaño del mercado global de productos derivados del desperdicio de alimentos se valoró en USD 52,91 mil millones en 2022. y se estima que crecerá a una tasa compuesta anual del 4,6 % para alcanzar los 83.260 millones de USD en 2032.
Echa un vistazo a nuestra visión sobre el futuro del cultivo de cacao para la próxima década y cómo planeamos alcanzar la meta de una industria alimenticia moderna y sostenible que contribuya a la economía circular. ¡Conoce más aquí!